IMAGINACIÓN MÁS FE – NEVILLE GODDARD

El tema de esta noche es imaginación más fe.
Imaginación más fe son la realidad de la cual el hombre moldea su mundo.
¿Y qué quiero decir con imaginación? Me refiero a Dios. El hombre es todo imaginación. Y Dios es el hombre.
Y existe en nosotros y nosotros en Él.

El cuerpo eterno del hombre es la imaginación humana. Y eso es Dios mismo.
El cuerpo divino: Jesús. Nosotros somos sus miembros
Depende completamente de nosotros lo que imaginamos. Pero, es imaginación más fe.
Porque se nos dice “sin fe es imposible agradarle”
Ahora, puedo decirte esta noche que tu propia maravillosa imaginación humana es Dios.
No puedo convencerte de que lo es. Te pido que lo intentes. Te pido que lo pruebes.
Pero no puedo persuadirte hasta el punto de convencerte. Tienes que llegar a ser auto-convencido a través de la experiencia.

Así que aquí, ninguna aseveración atrevida de mi parte, realmente no te convencerá. Pero tengo esperanzas. Que la imaginación es la única causa de los fenómenos de la vida.
Si por casualidad oyes la palabra “Dios”. La palabra “Señor”. La palabra “Jesucristo”. Y te transmite la sensación de algo existente afuera de tu propia maravillosa imaginación humana, tienes un falso señor, un falso dios y un falso Jesucristo.

Si de verdad sabes quién realmente eres. Que tu propia maravillosa imaginación humana es Dios, no puedes fallar en el logro de tu objetivo.
Todas las cosas son posibles para el que cree. Con Dios todas las cosas son posibles.
Ahora, eso iguala a Dios con el hombre.

Te lo cité desde el noveno de Marcos y decimonoveno de Mateo.
En Marcos, es el hombre: “Todas las cosas son posibles al que cree”.
En Mateo nos cuenta una historia.
Le dijo a un joven rico que vaya a vender todo si quería entrar al Reino de los Cielos. Véndelo todo. Y sígueme. Y el joven se sintió desanimado porque tenía muchas cosas, muchas posesiones.
Y luego dice: que es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un hombre rico entre al cielo.
Y entonces el discípulo dijo: “Bueno, ¿quién podrá ser salvo?”
Él dijo: “Para el hombre es imposible, pero con Dios todas las cosas son posibles”
O sea, para el hombre que no sabe quién es. Eso es lo que Él quiere decir. Para el hombre que no conoces el nombre del  Señor.
“Los que conocen tu nombre, ponen su confianza en ti”
Porque tú, oh Señor, no abandonarás a los que te buscan. Si conozco su nombre. Pero busquemos su nombre como nos fue revelado en las escrituras.
Y Moisés dijo a Dios: “Si voy a los israelitas, y les digo que el Dios de vuestros antepasados me ha enviado a vosotros. Y entonces me dicen, “¿Cuál  es su nombre?”
¿Qué debo decir? Y Dios le dijo a Moisés: Diles, “Yo Soy”. Eso es lo que soy. Simplemente diles que “Yo Soy” te ha enviado. Porque ese es mi nombre para siempre. Y por este nombre seré conocido por todas las generaciones. No tengo otros nombres. Sólo se consciente. Ser consciente es decir Yo Soy.
Sin emitir un solo sonido. Sólo ser consciente. Eso es Yo Soy. Eso es Dios.
Eso es lo que quiero decir cuando digo imaginación.

Ahora, ¿Qué es la fe?

Se nos dice en el capitulo undécimo de Hebreos: Que la fe es la seguridad de las cosas que se esperan.
 La evidencia de las cosas no vistas.
Por fe entendemos que el mundo fue creado por la palabra de Dios.
Que las cosas que se ven fueron hechas de cosas que no se ven. Y sin fe es imposible agradarle.
Él llama a una cosa que no se ve como si lo fuera. Y lo invisible se vuelve visible.

Ahora, habiendo descubierto quién es Dios mi propia maravillosa imaginación humana.
Entonces, ¿cómo puedo trabajar en la creación de algo que por el momento parece difícil o incluso imposible?
Comienzo en primer lugar, naturalmente con Dios, porque Dios es mi propia imaginación humana maravillosa.

Así que el don más bendecido en el mundo es una imaginación fuerte y vívida.
Una idea clara y una visión determinada de las cosas como me gustaría que fueran. Todo dentro de mi propia mente.
Construyo una escena que implicaría el cumplimiento de mi sueño. La veo claramente en mi mente. Le doy todos los tonos de realidad. Le doy tanta vivacidad sensorial como me sea posible. Y creo en ese acto de imaginación.
Lo tengo tan fijado en mi mente que estoy completamente ajeno a todas alrededor de mí que lo negarían.
Y camino en la asunción de que es así.

Asumo el sentimiento del deseo cumplido y simplemente ignoro todo lo que lo niega. Y camino en él.
Y así estoy llamando a una cosa que ahora no se ve como si se la viera. Y en ese estado invisible se hará visible.
Te digo que lo sé por mi propia experiencia. Nunca falla. Pero nosotros somos el poder operante.

Saber qué hacer es una cosa y hacerla es otra. O sea, que mientras lo estoy haciendo, saber que estoy haciéndolo bien. ¿Pero lo haré?
“Los que conocen tu nombre, ponen confianza en ti” Y cualquier otro dios es un dios falso.
Si te vuelves a otro Dios, te estás volviendo hacia un dios falso. Él está alojado dentro de ti, como se te dice en las escrituras.
“¿No se dan cuenta de que Jesucristo está dentro de ustedes?”
Examínense a sí mismos para ver si están sujetos a la fe. Pónganse a prueba a vosotros mismos.

Bueno, ahora, puedo ponerte a prueba, es este mismo momento. De hecho, ya te he dado la prueba.
Y tú serás el juez de si la repruebas o la pasas.
Yo uso la palabra Dios, uso la palabra Señor, uso la palabra Jesucristo.
Si tu mente se dirige hacia afuera, hacia algo que no sea tu propia maravillosa imaginación humana, fallaste en la prueba.
“¿No se dan cuenta de que Jesucristo está dentro de ustedes?”

Porque sea de la forma que sea, y no importa cuánto intentes poner excusas, si la mente sale a alguna imagen en el exterior, sin importar lo hermosa que sea, lo maravillosa que sea. Si sale al exterior, fallaste la prueba.
Así que nos dice: “Examínense a sí mismos para ver si están sujetos a la fe.”
Ahora te dice lo que es.
“¿No te das cuenta de que Jesucristo está en ti?”
A menos que, por supuesto, que no pases la prueba.

Ahora, esto podría ser un shock para todo el vasto mundo. Pero no puedo evitar contar la historia.
La he experimentado.
Sólo puedo compartir contigo lo que sé y te digo que si te atreves a asumir el sentimiento del deseo cumplido. Sabiendo quién lo está haciendo, ya que es Dios quien lo hace, porque Dios es tu propia maravillosa imaginación humana. Y Él lo está haciendo.
Si te atreves a asumirlo y caminas en la asunción de que es así.
Ignorando los sentidos, ignorando los hechos de la vida que lo niegan.
De una manera que no sabes, se convertirá en una realidad en tu mundo.

A esto me refiero con imaginación más fe, porque éstas son realidades de las cuales moldeamos nuestro mundo.


Toma como ejemplo a un hombre que es reclutado.
Fui reclutado en 1942 a la edad de 38 años. Al igual que otros millones, me atrevo a decir que todos se sentían como yo. Pero no conocían este principio. Yo sabía que no quería tener nada que ver con aquello. Sin embargo, fui reclutado.
No lo resistí. Me enviaron a Camp Polk, Luisiana.
Y después de tres meses en el entrenamiento de arranque, decidí hacer algo al respecto. Aplicando este principio.

En primer lugar solicité una baja honorable, porque había una regulación que vino desde Washington, que si un hombre era mayor de 38 años antes del primero de marzo de 1943, era elegible.
No decía que fuera automático. Si tu oficial de mando pensaba que te necesitaba en su compañía, esa decisión definitiva era del oficial de mando. No se podía apelar a ninguna instancia más alta. No se podía llevar al general.
Así que cualquiera que fuese tu oficial de mando, y en mi caso era un coronel, si decidía que te necesitaba en su batallón, debías quedarte.
Así que llené la solicitud basándome en el hecho de que yo era elegible, ya que cumpliría 38 años antes del primero de marzo de 1943. Y volvió  a mí “desaprobada”.
 Y firmada por mi oficial de mando.
Muy bien. Eso parecía definitivo, pero no hay nada definitivo en este mundo si sabes quién es Dios.
Si sabes que tu propia maravillosa imaginación humana es Dios, no aceptas nada en el exterior que esté en conflicto con tu maravilloso deseo.

Porque yo deseaba que me dieran de baja honrosamente. Salir del ejército y hacer el trabajo que estoy haciendo ahora porque lo había hecho antes y quería volver a hacer este trabajo.
Bueno, esa noche, aquí estaba la solicitud que recibí ese día: “Desaprobada” y firmada por el coronel Theodore Bilbo Jr. Su padre era el senador Bilbo de Mississippi.

Al disponerme a dormir en mi barraca con todos estos hombres a mi alrededor, asumí que estaba en mi propio apartamento en la ciudad de Nueva York. Yo lo conocía bien.
Había dejado a mi esposa y a una hija de sólo unos meses de edad, cuando fui reclutado.
Mi hijo se ofreció como voluntario y estaba con los infantes de marina en otra unidad. Y me recogieron y me reclutaron y mi hija nació a finales de junio de ese año. Así que sólo tenía unos meses. Y yo tenía a mi esposa y a una hija. Y así me imagine que estaba en casa.
Mi esposa en esa cama y yo en esta cama. Y mi niña por allá en la cuna.

Y luego inmediatamente asumí que estaba caminando por el apartamento
Era un bonito apartamento de siete habitaciones. Y caminé de habitación en habitación y toqué objetos y todo me pareció muy familiar.
Y miré a través de la ventana y vi a Washington Square.
Luego miré a mi derecha y vi la Sexta Avenida. Y después de haber pasado por todo el lugar, simplemente regresé a mi cama y lo asenté todo en mi imaginación.
Pero le di todos los tonos de la realidad. Le di una vivacidad sensorial.
Lo hice tan real que me pareció que en realidad estaba en mi apartamento en Nueva York.

Pero me aseguré de que no estuviera allí durante sólo de permiso. Estuve ahí porque me dieron de baja honorablemente.
Nada de permisos. Yo no iría a volver.

Bueno, a las cuatro de la mañana, ante mis ojos se presentó una hoja de papel y se parecía a la hoja que había recibido del coronel.
Porque decía “desaprobada”. Y cuando la miré, una mano apareció desde este lado y sostenía una lapicera. Y tachó la palabra “desaprobada” y escribió firmemente en letra imprenta “aprobada”
Y entonces la voz me dijo “lo que he hecho, lo he hecho”  “No hagas nada”
Desperté.

Y todos los muchachos estaban profundamente dormidos. Permanecí en mi cama, para no despertarlos.
Me quedé hasta el mismo momento en que pudiera bajar y afeitarme y asearme antes de que los demás lo hicieran. Lo cual hice.
Y esta cosa seguía impregnando todo mi pensamiento, lo que había pasado esa noche.
Durante nueve días no hice nada. En el noveno día, el mismo coronel me llamó.
Y en una conversación prolongada conmigo me dijo: “Vuelve con tu capitán de mando y dile que firme otra solicitud”
Y entonces volví, y no había hecho nada durante esos nueve días.
Y firmó otra solicitud, volví con el coronel, el coronel la aprobó y ese mismo día estaba en un tren desde Camp Polk, Luisiana, a Nueva York, de baja honorable.
Hasta el día de hoy ninguno supo ni sabe lo que hice. Lo hice todo con mi imaginación. Creí que lo que yo había hecho era un hecho real.

Yo creí que mis actos imaginarios crean hechos y por lo tanto viví en mi apartamento y dejé de ser un soldado.
Ahora era un civil, pero fui dado de baja honorable del ejército. No deshonrosamente. Y todo se cumplió en nueve días. Puedo multiplicar esta historia por cientos.

Si uno realmente lo hace, porque nosotros somos el poder operante. No sirve de nada hacer cosas insensatas e ir en contra del gobierno…  y luchar por tus objetivos, ya que no es necesario luchar en absoluto.

La voz me dijo “lo que he hecho, lo he hecho” “No hagas nada”
Bueno, ¿Dónde estaba esa voz? Dentro de mí.
Esa misma voz que oí venir desde fuera, provenía desde dentro de mí.
La voz dijo a Moisés: “Yo Soy. Eso es lo que soy”
Y escuchó lo que se susurra desde dentro, como si viniera desde fuera.
Porque, ¿no se nos dice en las escrituras que somos el templo del Dios viviente?
¿Y el espíritu de Dios habita en nosotros? ¿Y Dios es un espíritu? Bueno, si el espíritu de Dios habita en nosotros, ¿Cómo lo escucharía yo de otra persona?
Él viene de dentro de mí mismo. Y así lo escuché.

Bueno, sucedió lo mismo cuando no podía conseguir pasajes y aparentemente estaba atrapado en una isla.
Durante los meses venideros, ya que no había barcos viniendo. Yo hice lo mismo. Recordé lo que hice en el ejército para  salir, y lo hice cuando estaba en una isla y no podía salir.
A pesar de que había una lista de espera muy larga, me llamaron para darme los pasajes, para mi esposa, para mi hija y para mí mismo. Y sin embargo había miles de personas esperando por salir, por todas las Indias. Y sólo dos pequeños barcos cubriendo el servicio para todo ese grupo de islas.
Y simplemente logré salir. Sin importar cómo, lo hice normalmente, no maté a nadie, no soborné a nadie, no moví  ningún contacto. Simplemente apliqué este principio.

Si en realidad tuviera mi pasaje, ¿podría viajar? Sí. Bien, entonces asumí que estoy en un barco.
Y miraré hacia atrás nostálgicamente a la pequeña isla, dejando atrás a mis amigos y a mis familiares. Y llevando conmigo a mi esposa y a mi hija.
 Y miré atrás y me pareció tan natural y tan normal, le di los tonos de la realidad. Podía sentir la sal del mar en la cubierta mientras sostenía el riel del barco. Pude oler la crudeza del océano y pide ver la isla.

Y luego, en cuestión de 24 horas luego de haberlo hecho, recibí una llamada de la Alcoa Steamship Company para que vaya a verlos.
Fui y me dijeron: “Tenemos los pasajes para ti”. Sólo quedan dos camas, pero la niña puede dormir con su madre y usted puede dormir arriba. Y así había dos literas.
Y es un barco precioso, pequeño, que sólo transporta sesenta y tantos pasajeros. Pero salí y volví a tiempo, ya que me había comprometido a ir a Milwaukee antes del primero de mayo, y logré llegar. Llegué a tiempo.

Así que pido a todos que crean en Dios. Pero Dios no es algo fuera de ti. Dios es tu propia maravillosa imaginación humana. Si tienes a cualquier otro dios, tienes un dios falso.
Por lo tanto, no le des nada que no sean pensamientos amorosos. Nada más que pensamientos amorosos.
Siempre ejerce tu imaginación amorosamente y en nombre de todos en este mundo.

No te cuesta nada de dinero. Y no hace daño a nadie.
Y te encontrarás convirtiéndote en el hombre que quieres ser.
La mujer que quieres ser.
Y pasarás de etapa a etapa sin herir a nadie, y cumpliendo todos tus sueños.

Entonces sabrás cuán verdadera es esta afirmación: “Todas las cosas son posibles al que cree”
Porque con Dios, todas las cosas son posibles. Y tú has encontrado a Dios.
Lo has encontrado en ti mismo como tu propia maravillosa imaginación humana. Eso es Dios.

Como se ha dicho claramente en las escrituras.  Él es llamado en las escrituras “El Alfarero”
Y la palabra alfarero significa imaginación.
Así que voy a la casa del alfarero para ver cómo lo hace. Y lo encuentro trabajando con sus instrumentos. Y allí estaba en el campo haciendo algo a partir de barro.
Pero lo que tenía, la vasija que tenía en sus manos estaba estropeada.
Y la rehízo en otra vasija.
Según le pareció bien hacerlo. No la destruyó. No la descartó. La volvió a transformar en otra vasija.
Así que no descartas nada, sino que reelaboras las cosas.
Velas como te gustaría que sean vistas por el mundo. Velas en una vida más noble. Así es como la reelaboras en tu propia imaginación.
Y cree en lo que has hecho. Y todo se ajustará a ella.
Así que no descartas a nadie como algo que no se puede remediar o no se puede corregir en este mundo.
Lo corriges simplemente en tu mente.
Porque el alfarero es tu propia maravillosa imaginación humana.
 Y cualquier vasija que tengas. Ya sea otra persona o tú mismo. Vela como algo precioso.
Que en realidad eres el hombre que quieres ser. Que los que te rodean son lo que quieren ser. Y ten una buena imaginación vívida de ello. Un idea clara de los que realmente quieres en este mundo.
Y una visión determinada de la cosa como deben ser.
Y tenlos a todos fijados en tu propio ojo de la mente. Y créelo.
Entonces, de una manera que nadie sabe, todo llegará a pasar.

No te lo dirán. No necesitas antecedentes para aplicar este principio.
Si no tienes antecedentes sociales, financieros, intelectuales o de otro tipo, no importa. No los necesitas.
Es bueno tenerlos, no hay duda, pero muchos de nosotros nacimos sin estas calificaciones. Yo nací sin ellas.
No tenía antecedentes sociales, intelectuales o financieros. Ninguno en absoluto.
Nacido en una pequeña isla de una familia muy pobre. Una familia grande de nueve niños y una niña.
Donde mi padre y mi madre, naturalmente encontraron difícil mantener una familia de este tamaño.
Vestirla y educarla. Así que mi educación fue limitada.
Siempre tuvimos suficiente comida para comer, así que comíamos lo que la isla ofrecía, patas dulces, arroz, batatas, pescado. Así que teníamos lo suficiente, pero sin duda, no una gran variedad de cosas.
Y luego salí  de la isla cuando tenía 17 años. 17 años y seis meses. Y vine a este país.
Sin educación y por lo tanto me dijeron, “bueno, no puedes conseguir un trabajo”
Fui a un lugar determinado, me ofrecí para tender cables a través de los postes telefónicos.  Y me dijeron: “No estás calificado” y dije: “Bueno, soy fuerte, joven, sano, y bastante capaz de hacerlo”.
“No, no tienes la formación necesaria”
Así que finalmente encontré un trabajo en JC Penney.
Eso no era más que un buen chico de los mandados.

Así que, de lo que estoy tratando de persuadirte, es a seguir las escrituras.
Las escrituras son el mejor libro del mundo, y te enseña y te dice, te invita y te anima a ejercer tu imaginación amorosamente.
En nombre de cualquier cosa en este mundo. Y que no puedes fallar en alcanzar la meta que buscas en este mundo, si sabes quién eres.

Orar a un dios externo no te va a ayudar en absoluto. No hay dios externo.

 Dios en realidad, literalmente se hizo hombre, para que el hombre pueda llegar a ser Dios.
No está fingiendo que Él es hombre sabiendo todo el tiempo que no lo es. Literalmente se convirtió en hombre y se vació completamente de su poder divino.
Y tomó sobre sí las limitaciones y las constricciones del hombre.
Y encontrándose a sí mismo como hombre, ahora está sujeto a todas las debilidades del  hombre.
Pero al final descubre y recuerda quién es.

Y entonces, como el hombre recuerda quién es, comparte ese recuerdo con sus hermanos que aún no han recordado quiénes son.
Porque todos somos uno. Y hay un solo Dios.
Todos somos un Dios, enterrado en este estado fragmentado llamado humanidad.

Y así te estoy diciendo que esta noche, que no te va a tomar mucho tiempo. Si sabes exactamente lo que quieres en este mundo, y estas dispuesto a asumir que lo tienes, y duermes esta noche como si fuera verdad. Y hazte una imagen mental de amigos alrededor tuyo felicitándote por tu buena fortuna.
Y los ves en ese acto y lo aceptas, no estás dando excusas al respecto, lo aceptas como un hecho antes de que sea visto por el mundo.

La Biblia católica traduce esta frase mejor que todas las demás en lo que a mí respecta: Es el decimoséptimo versículo del cuarto capítulo de Romanos: Y dice: Dios llama cosas que no se ven como si se vieran y lo invisible se vuelve visible.
Las Biblias Protestantes, ambas, la del Rey Jacobo y la Versión Estándar Revisada, dicen: Él llama a la existencia las cosas que no existen. Eso lo cuestiono pues para mí todas las cosas existen.
Todas las cosas existen en la imaginación humana.

Bueno, realmente no las llamo a la existencia.
Puedo seleccionar la que quiero llamar a la existencia. Así que no puedo decir que llamo a la existencia las cosas que no existen. Porque sí existen. Pero los ojos de los mortales no las ven. Así que las llamo a la “existencia”.
Ahora, estas cosas invisibles son estados de conciencia. Y todos los estados existen. Existen ahora.
Tú y yo estamos viajando y viajamos a través de estados. Como una persona viaja a través de las ciudades.
Y Él deja detrás de él la ciudad, pero la ciudad permanece. Y él continúa.



Así que viajando a través de los estados, puedo viajar al estado de pobreza.
 La pobreza sigue estando ahí para que cualquier pueda entrar en ella. Pero después de compartirlo por un tiempo, no me gustó. Y entonces  salgo del estado de pobreza pero no destruyo el estado.
El estado está allí para que cualquier pueda entrar, si quiere entrar
Él puede sentir lástima por sí mismo y luego en poco tiempo, se encuentra en un estado que no le gusta. Pero no puede verlo como un estado y piensa: “¿Qué pasa conmigo?”
Sólo está en un estado. No condenes a un hombre por el estado en el que está.
Es un estado, y no puedes matar al estado o destruir el estado. El estado está allí  como una característica permanente del universo.


Pero quieres moverlo fuera  del estado, represéntalo ante ti mismo como el hombre que le gustaría ser.  Y velo como ese hombre en tu propia mente. Y lo sacarás de ese estado.
 El estado permanecerá para que cualquier entre, ya sea voluntaria o involuntariamente en ese estado.
Pero todos estamos avanzando por los estados.
 Y la persona simplemente se mueve y se mueve de un estado a otro. Y cuando descubres que puedes ir a donde quieres. No es un privilegio de los ricos, sino el privilegio del hombre que puede imaginarlo. Yo no tenía poder para salir del ejército.
No necesité de riqueza, no necesité de ningún antecedente. Todo que necesité fue el recuerdo de que Yo Soy.
Estate quieto y sabe que Yo Soy Dios.

¿No se nos dice eso en el Salmo 46? ¿El décimo versículo? “Estad quietos y sabed que Yo Soy Dios”
Pero si no puede hacerlo, no puedes ser tan arrogante, bien si no eres tan arrogante, bueno, entonces permanece donde estás. Permanece en este pequeño estado. Está perfectamente bien. Porque al estado no le importa cuánto tiempo lo ocupas. Se puede ocupar desde la cuna hasta la tumba, y no le importa. Pero mientras estás en el estado, vas a iluminar ese estado y vas a cosechar el fruto de ese estado.

Pero sabiendo que son estados, selecciona un estado más deseable y luego entra en este estado, bueno, ¿Cómo puedo entrar en los estados?
Todo es estado de ánimo.

¿No nos lo dijo Churchill? Que el estado de ánimo determina la fortuna de las personas en lugar de que la fortuna determina los estados de ánimo.
Él sabía de lo que estaba hablando. La fortuna no está determinando los estados de ánimo, los estados de ánimo determinan la fortuna de la gente. En lugar de que la fortuna determine los estados de ánimo.
Asumiré el sentimiento. Asumiré el sentimiento del deseo cumplido.
Y luego fue Anthony Eden quien nos lo dijo: Una asunción, aunque falsa, si se persiste en ella, se materializará en hechos.
Y no se puede negar a estos hombres, ambos Primeros Ministros de Inglaterra.
Churchill fue el gran Primer Ministro durante los años de la guerra y Anthony Eden lo sucedió después de que haya sido. Y cuando el partido conservador regresó al poder, fue Anthony Eden quien asumió como Primer Ministro.
Y acabo de citarte a estos dos Primeros Ministros.
Y un tercer primer ministro que es el gran Benjamin Disraeli que dijo: “el hombre no es víctima de las circunstancias, las circunstancias con creadas por el hombre”
Por lo tanto, depende totalmente de mí, si conozco el estado, ya que son estados infinitos, si entro en este estado o ese estado o el otro.
Y simplemente entrar en un estado a través de un estado de ánimo.
Eso es todo lo que necesito hacer. ¿Cómo sería la sensación si fuera verdad?
Bueno, entonces contemplo la escena y entonces, ¿Cómo sería si fuera cierto? Y si me atrevo a asumir que es cierto, ese es mi camino al éxito.
El sentimiento del deseo cumplido, sostenido, es el camino del hombre hacia el éxito.

Así que esta noche, sueña noblemente y no lo limites por tu estado actual, porque eso es sólo un estado.
Tú, el ocupante de este estado eres igual a cada ser en este mundo, porque sólo hay Dios. Y el ocupante de ese estado es Dios.
Así que quien tiene un billón de dólares hoy, está en un estado de fabulosa riqueza, pero él, el ocupante es el mismo ser que tú eres. Es Dios.
No hay nada más que Dios. Y el que está disfrutando de una gran salud, y el que ahora no está disfrutando de la salud, siguen siendo el mismo ser.
Así que, “¿Cómo sería si?” y me hago esa pregunta simple y capto el estado de ánimo.
Así que cuando se atrapa el estado de ánimo, entonces la fortuna sigue.

Todos estamos creyendo por delante de nuestra evidencia. No esperes la evidencia. Tú precedes a la evidencia por tu creencia, y la creencia es atrapada por un estado de ánimo.
¿Cómo sería si fuera cierto? Así que la imaginación más fe son las realidades de las que diseñamos nuestro mundo.
Y sin fe es imposible agradarle.

Eso es lo que nos dice en el versículo sexto del capítulo once de Hebreos.
Todas estas cosas maravillosas nos son enseñadas en las escrituras. Pero el hombre no lo ve correctamente. Lo ve como una historia secular y no es historia secular. Todo esto es historia de la salvación. Todo se trata de Dios. Y Dios se hizo hombre para que el hombre se haga Dios.
Así que en realidad, Él se sentó aquí en cada uno que se encuentra aquí.
Cuando dices “Yo Soy”, eso es Dios. No hay otro Dios.
Cuando oigas la palabra Dios mañana o escuches la palabra Jesús o escuches la palabra Señor. No fracases en tu prueba dejando que tu mente se dirija hacia afuera, hacia algo distinto de ti mismo.
Porque el Dios al que se habla en las escrituras es tu propia maravillosa imaginación humana.
Eso es Dios.


No hay una cosa en este mundo que ahora veas como un hecho que no haya sido imaginado alguna vez.
Trata de nombrarla. Nombra tan solo una. Todo fue imaginado primeramente.

Bueno, podrías decir ahora:”Bueno, los árboles, no los traje a la existencia”
Sí. Imaginación divina. En las profundidades de tu propio ser lo hiciste.

En la superficie puedes ver todas las cosas que hiciste.
Que la ropa que llevas tuvo que ser primero imaginada. El mismo edificio en el que está alojado ahora, tuvo que ser imaginado.
Todo esto procedió a la evidencia de lo que vino a la existencia en este mundo.
Pero si vas más allá de eso y dices: “Bueno, las piedras no lo fueron y los árboles no lo fueron”
Sí, todos lo fueron. En las profundidades de tu propio ser, pero ahora has cambiado la superficie en estas prendas.

Y se puede ver la evidencia de lo que el hombre imagina en  este mundo. Primero tuvo que imaginar ir a la luna, antes de que pudiera concebir los medios para llegar a la luna.
Y tú y yo tenemos que imaginar todo en este mundo antes de que pueda convertirse en un hecho en este mundo.
Pues no hay nada que ahora llamemos un hecho que no haya sido imaginado alguna vez.
Así pues, la realidad objetiva se produce únicamente imaginando.

Y ahora puedes empezar a imaginar un mundo más noble para ti y para tu círculo inmediato.
No tienes que ocuparte de todo el vasto mundo. Sólo tu círculo inmediato.
Cosas más nobles, más encantadoras que deseas experimentar en este mundo.
Y si lo imaginas y crees que lo que has imaginado es un hecho, se convertirá en un hecho.

Pero te digo, la imaginación crea la realidad. Porque Dios (la imaginación) es creativo.
Y el hombre imaginando es Dios. Por lo tanto es creativo.

Ahora mira el mundo y ve lo que le hemos hecho porque no sabíamos lo que estábamos haciendo.
El periódico de la mañana te mostrará lo más horrible del mundo. Y es todo imaginación del hombre.
No tiene por qué ser así.
 Pero nos alimentan con eso mañana, tarde y noche, porque el hombre no ha controlado su propia maravillosa imaginación humana. Cuando lo logre, llegará a tener… bueno, el  cielo en la tierra.

Así que si ahora podría todo resumir para ti:
El Dios de quien hablo es la imaginación humana. Y todo lo que debes hacer con Él es tener fe.
Y la fe es simplemente la apropiación subjetiva de la esperanza objetiva.
Y es una cosa tan fácil de hacer: simplemente te apropias de ella subjetivamente.

¿Cómo sería la sensación si fuera verdad?
Es la apropiación subjetiva de mi esperanza objetiva.

¿Quiero salir del ejército? Bueno, si yo estaba afuera, no estaría en Camp Polk. ¿Dónde estaría?
Bueno, me paro donde estaría. Estaría en mi casa, en Washington Square, en la ciudad de Nueva York.
Bueno, entonces voy para allá, bueno, ¿Cómo puedo llegar allá? Siendo que estoy en Camp Polk.
 Pues vas allá en la única realidad que existe. En tu imaginación.
Así que en mi imaginación, asumo que estoy en mi casa en la ciudad de Nueva York.
Y entonces pensé en Camp Polk y lo vi a dos mil millas al sur de donde estoy.
No es el lugar donde estoy, porque estoy en la ciudad de Nueva York. Así que al pensar en Camp Polk, lo vi muy lejos. Lejos en el sur, en Luisiana.
Y entonces vi el mundo DESDE ese estado.
Y después de haberlo visto desde ahí, me quedo dormido.
Y al quedarme dormido vino a mí una voz interna diciéndome que lo que he hecho, lo he hecho, que no haga nada.

Y en realidad tachó “desaprobada” y escribió “aprobada”. Y todo provenía de mi interior.
Pues un sueño, si lo llamamos un sueño, es egocéntrico. Así que todo tiene que tener lugar dentro de mí. Y sólo estoy compartiendo contigo lo que realmente he experimentado. Y luego, después de nueve días, estoy en camino, porque la visión tiene su propia hora.
Maduró en nueve días y luego floreció.
Y luego entré en presencia del coronel, me estrechó la mano.
Me fui a donde cobré el dinero que me debían, fui al lugar donde compré mi boleto y me dirigí a Nueva York.

Él era un caballero muy amable. Y había dicho que no discutiría con ese hombre.
No traté de persuadirlo exteriormente. No hice nada, como me lo había dicho la voz.
No levanté un dedo para discutir las razones del por qué debería estar afuera del ejército.

Él desaprobó la solicitud y la ley decía que no podrías llevar a ninguna otra instancia. La decisión del oficial al mando era definitiva. No podría llevarlo al comandante de división. Sólo a mi comandante de batallón.
Y sin aún así, logré salir.
Y no violé ninguna regla, simplemente seguí las reglas de César.
Y él mismo tuvo un cambio en su corazón y no supo por qué tuvo un cambio en su corazón.  Tuvo que hacerlo.
Tenía que hacerlo o el ejército tendría que hacerlo. Luego de que yo haya hecho lo que hice.

Y entonces la voz vino y lo afirmó, porque cuando la visión se vuelve hablada, se afirma la presencia de Dios. Y aquí está la visión ahora, veo la mano, veo el papel, veo la lapicera y aquí está la acción “aprobada”

Y luego vino la voz, por lo que la visión se volvió hablada y esta es la afirmación de la presencia de Dios.

Como nos dijo en el tercer capítulo del libro de Éxodo: “Y vio el arbusto ardiente y entonces el arbusto comenzó a hablar”
Y aquí estaba la visión, acompañada de palabras. Y cuando la visión se convierte en habla, la presencia de David se afirma.
Pero te digo, te sucederá a ti también. Y sabrás quién eres en realidad.

Que el Jesús de la Biblia, es el concepto más glorioso del mundo, pero es una realidad.
No es ningún mito, es cierto, pero ¿Dónde está Él? Está enterrado en el hombre.
 El hombre es el sepulcro en el que está enterrado. Está enterrado en tu propio cráneo.
Y un día de tu propio cráneo, se levantará. Pero cuando él se levanta, tú eres Él. Despertará dentro de ti.
No será otra persona, no verás otra persona. Eres tú, porque eres todo imaginación.

Y no observas la imaginación como lo haces con objetos. Tú eres la realidad que es llamada imaginación.
Así que no lo observas como otro, eres esa realidad, pero todo lo que se dice de Él, lo vas a experimentar.
Es una experiencia en primera persona, en tiempo presente y entonces sabrás quién eres realmente.
Cuando se levante en ti, como tú, sabrás quién es Jesús. Y entonces él dice “el que me ha visto a mí, ha visto al Padre” entonces sabes quién es el Padre.
Y entonces sabrás quién es el Hijo. Sabrás quién es el Hijo que te llama “Padre”. Algo que no se enseña en nuestras iglesias hasta hoy. Porque el hijo que te llamará Padre será David de fama bíblica. Él te llamará Padre, él te llamará “mi Dios” y “la roca de mi salvación” y sabrás que es cierto. No hay incertidumbre en cuanto a la relación entre tú y este Hijo que te llamará Padre.
Y entonces sabrás quién eres. Porque Él es el Hijo de Dios.  Como nos enseñó la Biblia.
Hablaré del decreto del Señor: Él me dijo: Tú eres mi hijo, hoy te he engendrado.

Estas son las palabras de David, y David, en espíritu te llamará “Mi Padre” y entonces sabrás quién eres. Conocerás a Dios. Porque nadie en el mundo puede convencerte de que eres Dios, excepto tu Hijo cuando te llama “Padre”
Te puedo decir que eres Dios desde ahora hasta el final de los tiempos. Pero no para convencerte, espero persuadirte y aflojar tu pensamiento un poco. Pero en realidad no puedo convencerte de que es cierto hasta que tu hijo, David se encuentra en tu presencia y te llama “Padre”

Y ahí lo sabes. No hay incertidumbre en cuanto a esta relación. Y entonces y sólo entonces sabrás que lo eres. Por eso se nos dice en las escrituras
“Nadie  sabe quién es el Hijo sino el Padre, y nadie sabe quién es el Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar”
Así que cuando el Hijo te lo quiera revelar, entonces sabrás lo que eres.
Pues tu propia maravillosa imaginación humana es el Dios de las escrituras. Y Dios, usando sólo fe, crea este mundo y puesto que está  alojado en tu interior, tu propia maravillosa imaginación humana, usando sólo fe puede crear el mundo en el que te gustaría vivir.

Ahora vamos a entrar en el silencio.

Traducido por Daniel Torres de la conferencia original en inglés Imagination Plus Faith.

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